Necesario invertir más en la niñez

Necesario invertir más en la niñez

Por: José Luis Castro Borrero

jueves, 27 de julio de 2017

Invertir en el pleno desarrollo de la niñez es un modelo de desarrollo económico, un sistema sustentable de salud, un modelo de cuidado y protección del ambiente, un sistema de promoción de cultura de paz y un sistema de prevención de desórdenes mentales, entre otros sistemas sustentables y permanentes.

Pero, ¿cuánto realmente invertimos en la niñez para lograr ese sistema sustentable y permanente? Según un análisis realizado por Fondos Unidos de Puerto Rico, en 2012 la inversión del Gobierno de Puerto Rico para la educación de la niñez fue de $7 mil por niño; mientras que el gasto del gobierno destinado para la corrección y rehabilitación de adultos convictos por delitos fue de $64 mil por confinado. Gastamos nueve veces más en la corrección que en la educación de los que llamamos el futuro del país. Al confrontarnos con estas cifras no podemos olvidar las palabras del psiquiatra estadounidense Karl A. Menninger cuando dijo “Lo que se les dé a los niños, los niños darán a la sociedad”.

Para vivir en un país próspero, seguro, con personas saludables, educadas; en el que hombres y mujeres puedan asumir las riendas con convicción de lo que es correcto y que logren autosuficiencia personal y económica, debemos tener en los niños y niñas, el principal sistema de inversión del país. Un niño educado será un profesional; una niña saludable no dependerá de los sistemas de salud gubernamental; un niño que valora el trabajo será un buen empleado; un niño que conoce y maneja sus emociones será un mediador de conflictos.  Por otro lado un niño no saludable podría convertirse en una carga para el país y una niña no educada podría terminar dependiendo de los sistemas de beneficencia pública.

Dice el Dr. James Heckman, Premio Nobel en Economía en el año 2000, que la inversión en programas especiales de educación para niños de entornos desfavorecidos tiene un retorno de inversión de entre 7 y 10% al año. En otras palabras, invertir en la educación de un niño o niña, se convertirá en un ahorro de 10% para el gobierno en un futuro no muy lejano.

Si el argumento es tan claro e inequívoco, ¿por qué el país no se mueve en esa dirección? Esa ha sido la tarea que Fondos Unidos de Puerto Rico le encomendó a la Fundación Agenda Ciudadana en 2014. Unir los saberes e ideas de académicos, profesionales de la salud y la educación con proveedores de servicios, funcionarios de gobierno, líderes religiosos y comunitarios, entre otros, para articular una agenda compartida que nos mueva como país en términos de visión, política pública y servicios en beneficio de la niñez en edad temprana. Buscar puntos de encuentro, donde lo que nos une nos acerque a la meta y que sea la punta de lanza del bienestar de la familia y la sociedad.

Durante estos años de caminar juntos, este ejército de hombres y mujeres han concluido seis propuestas y 14 planes de acción multisectorial sobre hacia dónde dirigirnos.

Ya hemos dado los primeros pasos, ahora seguimos caminando hacia esas metas comunes, uniendo las voluntades de toda aquella persona que quiere un Puerto Rico próspero con ciudadanos saludables, educados y aprestados para la vida y la prosperidad.