Proyecto de Pueblo

Cristóbal Rivera Ríos

Bayamón

¿Qué problema concreto atiende tu propuesta?

No soy político. Soy un simple ciudadano que se está preguntando, como entiendo hay muchos más puertorriqueños, si nos vamos a quedar con los brazos cruzados ante la debacle en todas las esferas sociales que vive el pueblo puertorriqueño. Es por eso, que aunque usted se ría de mi osadía, estoy lanzando la siguiente propuesta porque a la hora de morir quisiera poder decir, ¡hice lo que pude! Te invito a que visites mi blog y te unas. Rescatemos a puerto Rico.
Ha llegado el momento en que una gran cantidad de los puertorriqueños están de acuerdo en que hay que doblar todo esfuerzo posible, individual y colectivo, por una unidad de pueblo, para evitar que Puerto Rico se hunda del todo en un mar sin fondo y salida posible. Aún en el seno de los partidos políticos se puede encontrar voces  clamando por un cambio en la manera de gobernar al país, de forma que se atiendan con seriedad y responsabilidad los problemas sociales apremiantes que afectan el bien común; como son la salud, la seguridad, la educación, el desempleo; entre otros.
También esa misma cantidad de puertorriqueños está de acuerdo en que el generador de todos los males que aquejan al país es la división de los puertorriqueños, generada indudablemente por los partidos políticos y la lucha por el estatus político del Pueblo de Puerto Rico, quienes una vez llegan al poder, en vez de gobernar hacia el bien común, se les va su esfuerzo en mantener el poder con los suyos, o luchar por ganarlo, si son de los perdedores. La misma lucha por un poder que facilita, por encima de todo la satisfacción de los intereses personales o partidistas, conduce a que el dinero del fisco, así como, una buena porción del dinero proveniente de las ayudas federales, se diluya en la creación de instrumentos hechos a la medida para el mantenimiento del estatus quo y para la generación de facilidades hacia la complacencia de los colaboradores incondicionales con el liderazgo en el poder. Lo mismo ha contribuido, con la existencia de dos partidos principales, a la creación de una división del pueblo a tal grado, que aún las mejores propuestas hacia el mejoramiento de la calidad de vida de todo el pueblo, la mayoría de veces sucumbe ante los intereses particulares de los bandos que se disputan hasta el sin sentido,  la oportunidad de ser los protagonistas del poder.
Una conclusión sencilla a la que se puede llegar, es que el “estatus” es el problema fundamental del Pueblo Puertorriqueño. Aunque no es la primera vez que se admite esta realidad, no ha surgido aún una propuesta que contenga la posible solución del problema, sin rehuir el mismo y sin restarle importancia.  He aquí una que al menos nos encaminaría en corto plazo, a por lo menos ponernos en camino.

¿Cuál es tu propuesta concreta y puntual?

¿En qué consiste? Se trata de hacer una separación seria entre el problema fundamental del país sin abandonarlo, “el estatus político” y la administración de la gobernación. Esto  pondría en camino a los puertorriqueños hacia el restablecimiento  del amor al servicio público, capaz de lograr que un pueblo comparta con alegría, con esperanza y firmeza sus luchas, para lograr todo aquello que haría de su país  uno donde la vida pudiera sonreírle a ellos y a las próximas generaciones. Será un proyecto de “Pueblo donde cada ciudadano se sienta parte integral del mejoramiento de su país, no solo con su voto, sino con su participación ciudadana desde sus posibilidades.
¿Cómo lograrlo? Se han proclamado palabras o expresiones parecidas, pero no se ha dado la fórmula de cómo lograrlo. ¿Cómo hacer esta separación entre dos asuntos tan fundamentales dentro de un sistema democrático como el que vivimos?
Mis propuestas:
  1. Esto se logra con un “PROYECTO DE PUEBLO” que le garantice a ambos isues, igual de importancia, pero separadamente uno del otro.  “EL PARTIDO POLITICO QUE TRABAJA Y DEFIENDE UN IDEAL, NO PUEDE GOBERNAR EL PAIS CON LA DEBIDA IMPARCIALIDAD”. En los últimos 50 años, aunque con alguna variación, los partidos políticos ganadores de los comicios, han utilizado la confianza que les ha otorgado el pueblo para la administración de sus bienes y el desarrollo del pueblo en general, en escalinata para lograr riquezas personales rodeados de amigos y compadres y en canasta de ventajería para un costosísimo e inútil cabildeo a favor de su ideal político o para llenar sus bolsillos.
  2. Una vez que “El PROYECTO DE PUEBLO” gane el favor del pueblo, el nuevo gobierno con mayoría en las tres ramas de gobierno, establecerá una comisión de estatus con la participación de todos los partidos políticos, (de la cual no participará para nada la fortaleza o la Administración Gubernamental) encaminada hacia el establecimiento del un proceso hacia una Asamblea Constituyente de status, con un tiempo definido por los expertos unidos de cada uno de los ideales o posibles status participantes, a los que se les asignará un presupuesto anual en forma equitativa, para que cada cual de los ideales o posibles status participantes pueda llevar su mensaje educativo a sus respectivos correligionarios o posibles prospectos, libres de toda presión de influencias de variables extrañas al proceso educativo de cada ideal o status participante. Esto garantizaría la equidad, tan necesaria, para hacer con respeto y dignidad, lo que es tan importante para la vida presente y futura, y el desarrollo en todas las facetas de la vida social de cada pueblo. Parte de la educación dirigida por parte de sus líderes a sus respectivos correligionarios de cada Ideal de Status, conllevará la aceptación por parte de todos los puertorriqueños de los resultados finales que de manera democrática habrá arrojado La Asamblea Constituyente, de modo que todos puedan ir unidos  con una sola voz al Congreso de Los Estados Unidos de América del Norte, no a pedir ni solicitar,  sino a exigir como Nación Unida, que se respete la “VOLUNTAD” expresada en los comicios de tal Asamblea del Pueblo Puertorriqueño. De lo que se trata es de colocar la bola en la cancha del Congreso, pero no para que ellos jueguen solos con ella, sino para que respondan responsablemente a un asunto que podría llegar a convertirse  en un asunto  internacional debido a la condición colonial existente.
  3. Pero esto no se queda aquí. Mientras se lleva a cabo el esfuerzo común para unir a los puertorriqueños detrás de la solución del Status político, se llevará a cabo una total revisión total de cómo se utilizan los dineros disponibles para la administración del país. Ya se que casi todo el mundo se encuentra en una crisis moral político rampante. Pero hay otros que al poner al país primero han dado pasos agigantados de progresos en todas las áreas del vivir humano.
    1. Lo primero, rescatar el amor al servicio público. Para ello hay que hacerles justicia a las trabajadoras y trabajadores de todas las profesiones y servicios, dándoles la oportunidad, no solo de justas remuneraciones económicas, sino mejores condiciones de trabajo. No hay porqué haber jefes de agencias percibiendo grandes sumas de dinero cuando los que realizan la verdadera obra viven como limosneros, en especial, nuestras mujeres a las cuales y en la mayoría de los casos, no se les reconoce su valía. Queremos mejores familias, pero a las madres, se exige, en la mayoría de los casos, producción para la empresa, pero se les brinda muy poca ayuda, para al mismo tiempo puedan ser esposas, madres y educadoras de sus hijos. Todos proclamamos una mejor sociedad, pero, con mucha frecuencia, nuestros intereses particulares terminan por corroer su raíz; “la familia” célula” fundamental de la misma.
    2. Nuestros jóvenes graduados en las distintas profesiones y servicios, llenos de ilusiones y deseos de brindar sus talentos al bienestar de su pueblo, tienen, en su mayoría, que emigrar buscando su porvenir. Estos mismos jóvenes, en la mayoría de los casos podrían ser nuestros directores de agencias, con sueldos no mayores de 40,000.00 anuales.  El puesto sería su altar de servicio en el cual  pudieran ver sus sueños de ser útiles a la reconstrucción de su pueblo, al mismo tiempo de poder cultivar su experiencia para el futuro. Mientras tanto, los dineros que se pagan demás, muy bien pueden servir para distribuir en la clase trabajadora de esa misma agencia. No hay razón para la diferencia abismal, entre los sueldos de directores y sus colaboradores. Total, que, cada agencia, en la mayoría de los casos, ya tiene sus protocolos y procesos de servicios establecidos, así como su política pública, lo cual podría hacer que con la asesoría adecuada, un joven con las calificaciones debidas, muy bien podría estar a cargo.
    3. Para una asesoría adecuada, se pudiera formar un banco de servidores con experiencia en el área administrativa en distintas áreas, cosa de dar la mano a un administrador que al comienzo de incumbencia como director la necesite.
Y así sucesivamente, una vez que el Proyecto de Pueblo tenga el poder en sus manos, democráticamente, se harían los cambios pertinentes en las tres ramas del gobierno, poniendo las cosas en orden y estableciendo las debidas prioridades. Unidos lo podemos lograr.
Para esto, debemos hacer lo siguiente:
  1. Hay que rescatar a como de lugar el Sistema de Salud de manos de los empresarios “las aseguradoras”.
  2. Despolitizar el Departamento de Educación.
  3. Despolitizar la Universidad de Puerto Rico.
  4. Dar al Departamento de la Policía de Puerto Rico las herramientas necesarias, con especial atención en el área de prevención y educación de sus miembros y mejores condiciones de trabajo.
  5. Establecer un tope de sueldo para la legislatura y decidir el número adecuado de sus miembros.
  6. Eliminar los gastos superfluos
  7. Dignificar al magisterio brindándoles mayores salarios y mejores condiciones de trabajo.

En Puerto Rico hay gente muy buena y muy capacitada en todos los campos del saber con muchos deseos de que se les de la oportunidad de servir con el mayor deseo de sembrar una buena semilla para la cosecha de un mejor Puerto Rico en donde todos podemos vivir como hermanos. Tenemos la responsabilidad y la obligación de cuidar la herencia de nuestras futuras generaciones. Estamos a tiempo. Pueblo de Puerto Rico, vamos a unirnos “sin miedo”, Seamos “Pueblo” y no un reguero de gentes.

Comments

  1. Quiero unirme al rescate de este bello y amado pueblo . Es imperante la union de todos los puertorriqueños para que la fuerza y la voz de reclamo de un P. R. Para el pueblo y no para un grupito de negociantes sin escrupulos. Tenemos que abandonar la comodidad de opinar en voz baja y solitaria y combatir juntos para hacernos escuchar.