Listo el plan de seguridad

José Acarón, director del capítulo local de la AARP, (en primer plano) opinó que las estrategias del plan de seguridad apelan a todos los puertorriqueños. ([email protected])

Tras casi dos años de trabajo, la Estrategia Nacional de Seguridad Pública Solidaria para Puerto Rico está lista para ser presentada -tanto a las entidades comunitarias que la forjaron como al gobierno de turno- con el propósito de que sea adoptada y el país pueda convertirse en uno de los más seguros de todo el mundo.

Representantes de varias de esas entidades -que integran la Mesa de Diálogo sobre la Estrategia Nacional de Seguridad Pública Solidaria para Puerto Rico- participaron ayer en una mesa redonda con El Nuevo Día, en la que esbozaron su anhelo de que el plan se convierta en un proyecto de ley que rija la política pública sobre seguridad de ahora en adelante.

En principio, la Estrategia Nacional incluye propuestas y metas -integradas y basadas en evidencia científica- que se alcanzarían de forma escalonada en 10 años, período en el que el crimen en la Isla bajaría en un 30%.

“Se presenta un plan a 10 años, pero la idea es que se convierta en la política pública de seguridad en el país. Integramos propuestas que se venían dando por muchos años en Puerto Rico y que por distintas razones no quedaban recogidas en un plan de acción. Ahora lo que falta es voluntad y compromiso de adoptar el plan”, afirmó la presidenta de la Alianza Laura Aponte por la Paz Social (ALAPÁS), Myra Rivera.

“Pensamos en un plan a 10 años porque somos conscientes de que la efectividad de las propuestas no será inmediata. Pero también queremos un plan que esté protegido de los vaivenes político-partidistas”, indicó, por su parte, el exdirector de la Comisión para la Prevención de la Violencia (COPREVI), Samuel Figueroa.

La Estrategia Nacional aborda el tema de la violencia y de inseguridad social de manera integral, o sea, desde sus causas hasta sus consecuencias en todos los niveles de la sociedad. “Se toma en consideración desde niños hasta personas con impedimentos y envejecientes. No se ha dejado fuera a ningún componente social”, dijo Rivera.

Siete ejes

Los participantes de la mesa redonda explicaron que el plan creado tomó como modelo la Estrategia Nacional de la Seguridad de Chile, adoptado por la expresidenta Michelle Bachelet.

Según narraron, esa estrategia contó durante todas sus etapas con la voz, el peritaje y la participación ciudadana.

Aunque el plan chileno se basó en seis ejes (institucionalidad, información, prevención, control y sanción, rehabilitación y reinserción social y asistencia a víctimas), la Mesa de Diálogo sobre la Estrategia Nacional de Seguridad Pública Solidaria para Puerto Rico integró uno más: equidad.

“En la medida en que todos tengamos igualdad de condiciones para el desarrollo social y económico, seremos un país más seguro”, aseveró Rivera.

“Ahora tenemos un proyecto mucho más amplio que el de Chile”, agregó la presidenta de la Asociación de Psicología de Puerto Rico, Nydia Ortiz.

No obstante, la idea de crear un plan de seguridad nacional se remonta a hace -más o menos- una década. En el 2004, COPREVI intentó sin éxito elaborar un plan, aunque sí se dieron buenas recomendaciones. El esfuerzo se retomó en los Foros Ciudadanos que Agenda Ciudadana llevó a cabo en el 2007, y cobró aún más fuerza en los Foros Ciudadanos del 2011.

“Las organizaciones se dieron a la tarea de identificar en qué otras partes del mundo existían planes que pudieran atender el reclamo ciudadano que había aquí: la inexistencia de un plan nacional para atender los problemas de seguridad. Fue así que inició la discusión y dimos con el proyecto de Chile. Se hizo un estudio comparativo y se decidió incluir el séptimo eje, el de la equidad, por las condiciones de extrema desigualdad que se viven aquí y que están estrechamente ligadas al problema de la violencia”, recordó la directora ejecutiva de la Fundación Agenda Ciudadana, María de Lourdes Lara.

El producto final fue presentado y avalado por la Mesa de Diálogo, en la que hay miembros de la academia, gremios profesionales, el sector privado y grupos comunitarios.

La prevención como centro

Sin desatender los procesos que siguen a la comisión de un delito, la Estrategia Nacional se centra en la prevención, destacó el jefe de la Administración de Servicios de Salud Mental y Contra la Adicción (ASSMCA), Salvador Santiago.

Acentuó, además, que el plan va más lejos al procurar la rehabilitación y reinserción de la población convicta y, reconociendo que se trata de un tema salubrista, darles tratamiento a los adictos a drogas o alcohol.

“Si invertimos en prevención nos ahorramos más recursos a largo plazo, ya que evitamos que ocurran los incidentes. Pero necesitamos cambiar el paradigma; la adicción no puede tratarse como un catarro. La estrategia tiene que ser distinta, enfocada en la prevención”, dijo Santiago.

De igual forma, Kanti Méndez, especialista en investigación y evaluación de la organización Nuestra Escuela, subrayó que la prevención “es el eje principal” de la Estrategia Nacional porque “está demostrado que la violencia no se resuelve con violencia”.

La presidenta de ALAPÁS señaló que este enfoque preventivo también impactará a la Policía, por ejemplo, a través de adiestramientos en derechos civiles y humanos a los uniformados.

“Las estrategias de prevención incluidas en el plan son a nivel comunitario, familiar y escolar. Recogimos proyectos que ya están implementados -validados en prácticas basadas en evidencia- y que pueden expandirse a nivel nacional”, manifestó Rivera.

Ayuda a víctimas y agresores

Rivera tildó la asistencia a víctimas como otro acierto de la Estrategia Nacional. Según dijo, lo que se persigue con este eje es garantizarle a las víctimas de violencia su derecho a la protección y su restitución a la sociedad.

Mabel Lasalle, consultora del movimiento Pero hoy no es el día, distinguió que la Estrategia Nacional también procura “restaurar al agresor, que suelen ser muy poco atendidos”.

En opinión de José Acarón, director del capítulo local de la Asociación de Personas Retiradas (AARP), las estrategias y metas compiladas en el plan de seguridad le apelan a todos los puertorriqueños, ya que recogen la esperanza de un país mejor.

“Lo que buscamos es que la gente se apodere para tomar acción y prevenir la violencia en Puerto Rico; que se vuelva a vivir en comunidad”, planteó.

Los participantes de la mesa redonda informaron que este viernes, 8 de noviembre presentarán al país un resumen de su trabajo realizado. A ese evento, que tendrá lugar en el recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico, asistiría el gobernador Alejandro García Padilla, de quien se espera un compromiso de “aceptar y adoptar” la Estrategia Nacional.

Por: Gerardo Alvarado

Publicado en El Nuevo Día el 5 de noviembre de 2013